
Como muestra de la lucha contra la criminalidad, particularmente contra la explotación sexual y comercial, las autoridades capturaron a dos sujetos presuntamente vinculados a trata de blancas y a delitos sexuales contra niñas, niños y adolescentes.
De manera articulada, la Alcaldía de Medellín, la Policía Nacional de Colombia y la Policía Federal de México capturaron a alias “El Mexicano” en el centro comercial Milla de Oro. Este hombre se hacía pasar por empresario del Parque Lleras para contactar mujeres con fines de explotación sexual, tenía residencia en El Poblado, vehículos blindados y un patrimonio superior a los $8.000 millones.

Durante más de 90 días, las autoridades siguieron la pista a la organización que lideraba, la cual engañaba a mujeres con promesas falsas y luego las obligaba a firmar contratos en México imposibles de pagar, donde eran despojadas de sus documentos y retenidas contra su voluntad.
Las víctimas intentaban acudir a los consulados y a las autoridades mexicanas para asegurar su repatriación. El detenido quedó a disposición de la Fiscalía General de la Nación, a la espera de la documentación para proceder con su extradición a México, donde enfrenta acusaciones por trata de personas y explotación sexual, en modalidad agravada.
En otro operativo, en el Aeropuerto Internacional José María Córdova, fue capturado un peruano, residente en Estados Unidos. Esto fue posible en el marco de la estrategia contra la explotación sexual de niñas, niños y adolescentes, en un trabajo conjunto de la Administración Distrital, la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, la Fiscalía General de la Nación y Migración Colombia. Además, se contó con la colaboración con la agencia HSI de la Embajada de Estados Unidos.

A este extranjero se le relaciona con la explotación sexual de varias menores en la comuna 16 – Belén, donde alquilaba alojamientos por medio de plataformas digitales para organizar sus encuentros.
Las autoridades le decomisaron dos celulares que serán analizados y servirán como prueba de las conversaciones con las víctimas. Según las investigaciones, el individuo contactó a jóvenes de 14 y 15 años en situación de vulnerabilidad y precariedad económica, entre 2022 y 2023.
Estos encuentros eran concertados mediante el pago de sumas que iban de los $150.000 a los $300.000. El hombre fue imputado por la Fiscalía General de la Nación por explotación sexual y comercialización de menores de 18 años.
